La adolescencia es una época, por lo general, COMPLEJA y difícil tanto para los jóvenes como para sus familias. Es un periodo, por un lado, de descubrimiento de la propia identidad y, por el otro, de ganancia progresiva de autonomía personal.
Es tiempo de cambios físicos y emocionales, de construcción, de reorganización de las relaciones, de ilusión y a la vez miedo por lo que viene y también de pena por la pérdida de esa infancia que se suelta y se deja atrás.
Es por ello por lo que doy apoyo en las siguientes áreas: Problemas de conducta, inseguridad personal, baja autoestima, adicciones, procesos ansioso-depresivos, inestabilidad emocional, absentismo escolar…